viernes, 20 de junio de 2008

ACTO DE LANZAMIENTO DE LA CAMPAÑA NACIONAL E INTERNACIONAL


ACTO DE LANZAMIENTO DE LA CAMPAÑA NACIONAL E

INTERNACIONAL:


“POR EL DERECHO A LA OPOSICIÓN POLÍTICA EN

COLOMBIA”


Senadora Gloria Inés Ramírez Ríos


Este acto es una ocasión propicia para hacer algunas reflexiones sobre la coyuntura política nacional y sobre el papel que el Polo debe desempeñar en ella, creo que todos en el Polo estamos de acuerdo en que el país atraviesa una profunda crisis política e institucional.



Esa crisis es el resultado de la descomposición del régimen, que se expresa, entre otros hechos, en la “parapolítica” y en la “yidispolítica”. En cuento a lo primero, no hay ningún caso en el mundo en el que un número tan alto de parlamentarios y ex altos funcionarios del Estado ligados al gobierno estén procesados o en la cárcel por sus vínculos con bandas paramilitares y mafiosas, este sólo hecho revela la gravedad de la descomposición del régimen.


En cuanto a lo segundo, la aceptación de Yidis Medina de los cargos por el delito de cohecho, demuestran que la reelección de Uribe fue inconstitucional e ilegítima, por lo tanto, es incaceptable que la tan publicitada “popularidad” de Uribe se pretenda utilizar para ocultar esta realidad y resulta inconcebible que haya quienes reivindican aspectos supuestamente positivos de la política de “seguridad democrática”, o que se atrevan a insinuar acuerdos con los personeros de un régimen que es producto de la ilegalidad y el crimen.


Como es práctica inveterada de este gobierno con los grandes problemas del país, su actitud consiste en negar la existencia de la crisis y en hacer toda clase de maniobras distractoras para tratar de ocultar la realidad, por ejemplo, ha hecho carrera la tesis de que los problemas sólo afectan al Congreso de la República, como hay un congreso malo y gobierno bueno, el primero debe ser revocado y el segundo deber ser reelegido con el mayor cinismo, se pretende perpetuar un gobierno que es el principal responsable de la crisis que sacude al país.


Últimamente se ha echado mano de un recurso infame que venía siendo anunciado desde tiempo atrás: el de vincular a la oposición con los grupos guerrilleros, la aparición de supuestos documentos en los también supuestos computadores de Raúl Reyes está siendo utilizada para enjuiciarnos ante la Corte Suprema de Justicia a unos y ante la Fiscalía General de la Nación a otros. La validez de tales pruebas, aún suponiendo que existan, es nula, por cuanto fueron obtenidos de manera ilegal, violando la soberanía de un país hermano, y porque no se sometieron a la cadena de custodia que exige la ley.


En mi caso, de las informaciones de prensa que conozco puedo decir: Que no conocí personalmente a Raúl Reyes ni tuve con él ningún tipo de relación, de dónde resultan, entonces, los correos que, según la prensa, nos cruzamos entre él y yo? Por lo mismo, es inverosímil y, además ridícula, la versión que me hace aparecer como la compañera sentimental de Raúl Reyes, lo que en realidad ocurre es que se ha desatado una auténtica cacería de brujas que tiene, a mi juicio, dos objetivos: Ocultar las verdaderas dimensiones de la “parapolítica” y la “yidispolítica”; mostrar públicamente que también la izquierda está contaminada de ilegalidad y violencia, para despojarla de cualquier autoridad moral para enjuiciar al régimen y para presentarse como alternativa a la crisis.



Por estas razones, me resulta particularmente doloroso que haya personas que desde la izquierda se atrevan a dudar de nuestra integridad moral y política y hayan llegado hasta el extremo de sugerir nuestra expulsión del Polo. Haríamos bien en revisar nuestros métodos e instrumentos para el debate de los distintos temas, a fin de que no resultemos tomando en préstamo los peores argumentos de la derecha más recalcitrante para sustentar nuestras posiciones.


También sería conveniente no insistir tanto en temas sobre los cuales el Polo tiene definiciones claras en el Ideario de Unidad, me refiero, en concreto, a la llamada “combinación de las formas de lucha” que de tiempo en tiempo se desempolva para estigmatizarnos, desde mucho antes de que existiera el Polo, nuestra definición clara e inequívoca es por la solución negociada del conflicto interno y por el acuerdo humanitario nadie en el Polo ha propuesto ni defendido la citada “combinación” y, por tanto, la discusión debe ser sobre nuestras iniciativas para hacer posible la salida negociada y el intercambio humanitario.


Debemos hacer esfuerzos por definir claramente nuestro rumbo, nuestras posiciones y nuestras propuestas frente a la crisis, el gobierno tiene claramente establecido para dónde va:
Tumbó la precaria reforma político que él mismo había presentado al Congreso, cuando advirtió que podría poner en riesgo la nueva reelección de Uribe; ha convocado la llamada Comisión de Notables para que elabore una propuesta de reforma política todo hace presumir que dicha reforma estará enfocada a proponer fórmulas para darles respuesta a algunas inquietudes que hay en amplios sectores de la oposición pública, como el equilibrio de poderes y lo que algunos llaman relegitimar la institucionalidad, con miras a allanarle el camino a la nueva reelección de Uribe.



En tales condiciones, la discusión al interior del Polo y con otras fuerzas no debe limitarse a acordar la mecánica de selección de un candidato antireeleccionista. El Polo tiene la obligación política y moral de proponer alternativas, no solo para la reelección, sino para afrontar los distintos aspectos de la crisis del país, en lo político, en lo institucional, en lo económico y en lo social, la principal propuesta que hemos hecho hasta ahora es la de recurrir al pueblo y convocar una asamblea constituyente que haga los cambios necesarios para la transformación democrática del país. Sin embargo, casi nadie ha vuelto a hablar de ella, es urgente comprometernos en la tarea de darle contenido a esa propuesta y trabajar decididamente para que el pueblo se apropie de ella, de lo contrario, la iniciativa política, que es tan necesaria hoy, seguirá en manos de la derecha.


La “gran política” en las actuales circunstancias debe ir más allá de las preocupaciones acerca de cómo acordar un candidato a la sucesión de Uribe, sin importar que nos llevemos por delante los acuerdos políticos, el Ideario de Unidad y los Estatutos del Polo, de lo que se trata es de construir una alternativa política y no una simple opción electoral.


Invito a que construyamos un Polo profundamente enraizado en las masas, con la seguridad de que por esta vía seremos invencibles e indestructibles.


Les reitero mis agradecimientos a la dirección del Polo y a todos los miles que me han hechos llegar sus mensajes de aliento y solidaridad.


Sea esta, igualmente la oportunidad para manifestar mi compromiso público de solidaridad y de consecuencia a la Senadora Piedad Córdoba, a mis compañeros de Bancada WILSON BORJA y ALEXANDER LÓPEZ, a los doctores ALVARO LEYVA y ALFREDO MOLANO, a mi Compañero y Camarada el Periodista CARLOS LOZANO GUILLÉN, con la certeza de que estamos enfrentando un JUICIO POLÍTICO no solo como actores de la lucha social y política que ha librado nuestro pueblo, sino como integrantes de la IZQUIERDA COLOMBIANA, que hoy funge como alternativa real de PODER POPULAR, capaz de conducir los destinos de la Nación por los caminos de la libertad, la esperanza y el progreso y, en razón de ello, convoco a todas y todos ustedes, que nos han acompañado en el lanzamiento de esta campaña, A CONTINUAR FORTALECIENDO Y ORGANIZANDO LA RESISTENCIA POR EL DERECHO AL EJERCICIO DE LA OPOSICIÓN EN COLOMBIA Y POR LA INSTAURACÓN DE UN GOBIERNO DEMOCRÁTICO.



Permítanme renovar los indispensables abrazos que hoy necesitamos de ustedes para rodearnos de toda la fuerza de su presencia, de su solidaridad, de su amistad y de su afecto.

Bogotá, D.C. 19 de junio de 2008

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